sábado, 29 de marzo de 2014

El sentido del sufrimiento.

Muchas veces nos pensamos que si algo va mal todo pierde el sentido. 

Pero si creemos que Dios es todo poderoso y nos ama ¿Como puede quedar algo fuera de su alcance y que nos pasen cosas malas? 

Muchas veces nos encerramos en el sufrimiento y ni nos preguntamos por que Dios lo consiente.

Si Dios permite algo siempre es por nuestro bien, siempre... ¿Conocen aquello de que no hay mal que por bien no venga? 

Es así, debemos preguntarnos ¿Por que Dios esta permitiendo esto en mi vida? hay una razón.

Tal vez no se vea claramente en el momento, los planes de Dios no son instantáneos. 

Otros puede que si.
Un día me castigan sin salir y me enfado y pienso que es injusto, esa misma noche mis amigos tienen un accidente de coche. 

Lo que nos puede parecer injusto en un momento nos puede parecer una "gran suerte" en otro. 

También pensando en la muerte decimos ¿oh por que a mi? y nos enfadamos con Dios... oigan ¿que no saben que la culpa de nuestra mortalidad es solo nuestra por desobedientes? 

De todas formas es algo natural a cada cual le llega su hora cuando Dios decide que estamos maduros para el encuentro con Él. 

Es una tontería enfadarse con Dios por eso, por que todos tenemos que pasar por ahí. 

Pero hasta la muerte es para nuestro bien, solo quienes piensan que la muerte es el final de todo pueden ver como escandalosas estas palabras. 
Pero si Dios decide llevarme seguramente es por mi bien o incluso el de los demás. 

De todas formas ¿que pensabas? ¿quedarte eternamente aquí?

Pero vallamos a otros sufrimientos, como la enfermedad u otras cosas, simplemente cosas que nos hagan sufrir. 

¿De verdad creen que si el sufrimiento no tuviese sentido Dios se habría dejado hacer todo lo que le hicieron?


Ofrezcan-las a Dios, ofrezcan-las por los demás. 

Esto es una experiencia personal. 

Este año fui a la peregrinación de JRC que nos lleva a Fatima a ver a la Virgen.

Lo pase muy mal en un sentido físico, no así en un sentido espiritual. 

Me encontraba mal, estaba muy mareado por el viaje en bus y encima teníamos que andar mucho hasta llegar a Fatima. 

No bastaba eso si no que ademas llovía a cantaros, tanto es así que mis pies se escocieron y estuve los 4 días restantes que iba cojo. 

Lo pase realmente mal. 

La cuestión es que en el trayecto de la peregrinación me confesé bajo aquella lluvia y la penitencia fue ofrecer todos mis sufrimientos causados por aquella peregrinación. 

Ofrecer-los por mis amigos y por mis compañeros de peregrinación.

Esto cambio la perspectiva de todo. 

Ahora cada dolor cada angustia cada sufrimiento se convertirían en gracias para los demás, el sufrimiento ahora tenia un sentido clarisimo para mi. 

Me dio la fuerza necesaria para seguir, sabia que cuanto mas sufría mas gracias recibían los otros, así que dejo de ser una carga pesada y se convirtió en un fin en si mismo.

Dios no deja las cosas al azar todo tiene un sentido pero tienes que tener Fe. La Fe es lo que da sentido al mundo sin ella la vida es un absurdo insoportable. 

Dios los bendiga. 

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